Calabazas y pirotecnia: Consejos veterinarios para proteger a las mascotas en Halloween

Halloween, una fiesta cada vez más popular en España y en todo el mundo, fundamentalmente por la influencia de Estados Unidos, parece tener su origen en el mundo celta y lleva celebrándose siglos en Escocia e Irlanda. De hecho, los inmigrantes escoceses e irlandeses llevaron muchas de las costumbres de esta celebración a EEUU durante el siglo XIX.

Ahora, tanto una institución irlandesa veterinaria como una estadounidense han compartido una serie de recomendaciones para proteger a los animales de compañía durante la noche de Halloween, que puede ser terrorífica y peligrosa para las mascotas.

De esta forma, Veterinary Ireland, asociación que representa a la veterinaria irlandesa, ha compartido unos consejos y ha instando a los propietarios a que tomen medidas para mantener a salvo a sus animales de compañía este Halloween.

“Dado que su oído es mucho más sensible que el de los humanos, la mayoría de las mascotas se asustan con los ruidos fuertes y repentinos, así como con los destellos de luz, por lo que las semanas previas a Halloween pueden ser muy angustiosas”, remarcan los veterinarios irlandeses.

En este sentido, indican que hasta el 80% de los propietarios de mascotas afirman que su animal de compañía tiene miedo a los fuegos artificiales y que la mayoría de las mascotas muestra síntomas leves de miedo o ansiedad al principio, pero si no se tratan adecuadamente tienden a empeorar.

“Algunos de estos animales pueden sufrir fobias al ruido: su reacción a ciertos ruidos es repentina, extrema y excesiva. Esto puede ser muy angustioso tanto para los animales como para sus propietarios y puede provocar daños a la mascota, por ejemplo, los perros pueden entrar en pánico y correr sin control. Halloween es una época del año en la que las mascotas suelen perderse o sufrir accidentes en la carretera”, advierten.

Asimismo, explican que algunos signos de ansiedad a los que hay que prestar atención en los animales de compañía son, en el caso de los perros, escalofríos o temblores, comportamiento destructivo (por ejemplo, masticar o arañar, ensuciar la casa, jadeo excesivo e intentar huir. En el caso de los gatos, subrayan como signos de ansiedad, encogerse o esconderse, ensuciar la casa, negarse a comer o intento de huida.

CONSEJOS DE LOS VETERINARIOS DE IRLANDA PARA PROTEGER A LAS MASCOTAS EN HALLOWEEN

Por todo ello, Veterinary Ireland ofrece una serie de consejos a los propietarios de animales de compañía. “Lo ideal es que alguien se quede con la mascota cuando se oigan fuegos artificiales, especialmente la noche de Halloween”, recuerdan los veterinarios.

Asimismo, recomiendan proporcionar un lugar o un escondite donde la mascota pueda sentirse segura y preparar una cama cómoda, con sudaderas viejas y otras prendas que le den la sensación de la presencia tranquilizadora del propietario. “Una jaula con algunas mantas por encima es ideal para un perro. Un gato puede preferir esconderse en un lugar alto, como la parte superior de un armario”, indican.

También, para combatir el ruido de la pirotecnia o los petardos que se puedan lanzar, aconsejan mantener a la mascota dentro con las puertas y ventanas cerradas y con una emisora de radio encendida en la habitación, así como proporcionar una bandeja sanitaria adicional para los gatos y procurar que el perro haga ejercicio a primera hora del día y darle algo que hacer por la noche (como masticar un juguete para perros).

“Asegúrese de que todas las mascotas lleven placas identificativas y microchip: por si acaso su mascota huye al oír los fuegos artificiales, las posibilidades de reunirse con ella aumentan considerablemente con la identificación”, remarcan.

Otro punto que consideran importante es no prestar atención as comportamientos temerosos como jadear, temblar o quejarse. Si los dueños prestan más atención a estos animales para intentar reconfortarlos, la mascota puede percibirlo como una recompensa por mostrar este tipo de comportamiento, lo que puede empeorar las cosas con el tiempo.

Los veterinarios irlandeses también consideran que no hay que castigar a la mascota por comportamientos ansiosos como arañar las puertas o ensuciar la casa, ya que se puede exacerbar la ansiedad y empeorar la situación.

“Existen difusores, sprays y collares que contienen feromonas, así como otros productos que puede adquirir en su veterinario, todos los cuales pueden ayudar a aliviar la ansiedad de las mascotas”, recuerdan.

Por último, los veterinarios irlandeses piden tener cuidado a la hora de buscar un disfraz para los animales de compañía y recuerdan que no hay que compartir los dulces o golosinas de Halloween con las mascotas. “El chocolate puede ser peligroso para los animales, especialmente para los perros, y puede hacer que enfermen”, concluyen.

CALABAZAS, ELEMENTO TÍPICO DE HALLOWEEN QUE PUEDE SER UN ALIADO PARA LAS MASCOTAS CON PRECAUCIONES

Tallar calabazas con caras espeluznantes o diferentes patrones es una actividad que, aunque no esté especialmente extendida en España, es una de las primeras cosas que vienen a la cabeza al pensar en Halloween. Por ello, la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Texas A&M ha centrado sus consejos sobre la creación de linternas con calabazas.

Así, ha compartido un texto que recuerda que las calabazas son seguras para gatos y perros, en el que su profesora clínica asociada de gastroenterología comparadas y de pequeños animales Katie Tolbert afirma que las familias pueden tallar calabazas sin peligro para sus mascotas, siempre que los propietarios estén atentos a la cantidad de calabaza que come el animal de compañía, ya que existe riesgo de asfixia.

En general, la calabaza puede ser una excelente golosina para perros y gatos porque es sabrosa y baja en calorías, lo que la convierte en una alternativa saludable a las golosinas tradicionales. "Las calabazas contienen aproximadamente un 90% de agua, por lo que pueden saciar al animal sin aumentar su ingesta calórica, lo cual es beneficioso para mascotas obesas o con sobrepeso", destaca Tolbert.

Asimismo, dejar que las mascotas coman del interior de una calabaza fresca, incluidas las semillas y las hebras fibrosas, puede aportar otros beneficios para la salud, en concreto fibra, que puede aliviar los problemas digestivos, pero sólo si se come en pequeñas cantidades.

Eso sí, la experta advierte que, cuando los propietarios dejan que su mascota coma calabaza, deben pensar en ello como si le estuvieran dando golosinas. “Las golosinas deben suponer menos del 10% de su ingesta calórica total", enfatiza.

En este sentido, si los dueños no tallan calabazas o no disponen de calabazas frescas, pueden ofrecer a sus mascotas un capricho de Halloween en forma de calabaza en conserva. Sin embargo, aconseja considerar cuidadosamente qué calabaza enlatada comprar, ya que algunas no son seguras para las mascotas.

"Si compra calabaza en conserva, busque las que no tengan azúcares añadidos. Algunos azúcares son tóxicos para las mascotas, en particular el xilitol para los perros, así que compruebe la etiqueta nutricional antes de compartir calabaza enlatada con sus mascotas", remarca.

LOS PELIGROS DE LAS CALABAZAS PARA LOS ANIMALES DE COMPAÑÍA

Los propietarios también deben ser conscientes de algunos problemas de seguridad que las calabazas crudas pueden plantear a sus mascotas. “Cuando se talla una calabaza, es habitual tirar trozos de su corteza, o cáscara exterior dura, pero la corteza es la parte más peligrosa de la calabaza para las mascotas por su dificultad para comerla y digerirla”, destaca.

“Si las mascotas no mastican adecuadamente las partes más duras de la calabaza, pueden atascarse en el esófago. Incluso si un animal es capaz de tragar la corteza, podría pasar demasiado rápido al intestino delgado y quedarse atascada allí”, advierte

La experta indica que “las mascotas que se atragantan porque tienen partes de una calabaza atascadas en el esófago sienten dolor e incluso parecen letárgicas o cansadas. También podrían tener mucha saliva goteando de la boca, intentar tragar con fuerza repetidamente, regurgitar contenidos de su esófago o vomitar contenidos de su estómago e intestino superior”.

Tolbert recomienda encarecidamente a los propietarios que lleven a su mascota directamente al veterinario si observan signos de atragantamiento, ya que es extremadamente difícil eliminar las obstrucciones sin intervención veterinaria.

Además de los riesgos de asfixia, los propietarios deben tener en cuenta los problemas de toxicidad determinando el grado de madurez de las calabazas: cuanto más madura (o menos fresca) sea la calabaza, mayor es la probabilidad de que sea tóxica. Cuando las calabazas maduras estén blandas, descoloridas o huelan mal, los dueños deben tirarlas para evitar la intoxicación de su mascota.

“No hay partes de una calabaza que sean directamente tóxicas para las mascotas, a menos que la calabaza esté muy madura y tenga moho o algún tipo de bacteria. Al igual que cualquier alimento que se haya dejado fuera durante demasiado tiempo, tallar una calabaza madura después de que haya estado colgando durante un tiempo podría presentar un peligro de toxicidad para las mascotas. Una buena regla es que si usted no se la comería o no dejaría que su hijo se la comiera, su mascota tampoco debería hacerlo”, concluye Tolbert.